Una empresa bien constituida, que presta servicio de calidad y alto rendimiento, contrata personal especializado que demuestre sus capacidades. Una compañía con  alta rentabilidad es consecuencia de su capital humano, por ello la importancia de la selección de personal.

Reclutar buenos candidatos para tu empresa puede ser increíblemente frustrante, puesto que se le debe dedicar una cantidad significativa de tiempo y esfuerzo al desarrollo de lo que se cree son las estrategias sólidas para el proceso de contratación. 

Después de todo, no debemos olvidar que los empleados son el pilar fundamental de toda compañía y de no contratarse el personal calificado, la organización será la más afectada.

Es importante contar con una flotilla de empleados cuyas habilidades, experiencias y conocimientos aporten beneficios a la entidad, desempeñando su función de manera positiva. El contratar personal que no sea apto para algún puesto de trabajo en específico, traerá como consecuencias pérdidas a la empresa.   

Cuando hablamos de pérdidas y consecuencias que una mala selección de personal puede ocasionar a la organización, podemos nombrar algunas como:

Insatisfacción: Por parte del empleado y por parte del empleador, ocurre cuando la empresa no recoge la información suficiente sobre la persona que desea contratar. Si bien es importante y necesario emplear personal con un desarrollo profesional en su carrera, no podemos dejar de lado las actitudes y aptitudes de la persona.

Pérdidas: No solo de clientes sino también de ganancias, esto se basa en los reclutamientos tardíos, sobre todo en los puestos de los líderes; por ello, es necesario que, si bien se debe ser objetivos al momento de seleccionar personal, también debe ser lo menos tardío posible.

Adaptación tardía: Esto por parte del candidato. Por ello, es importante conocer bien las actitudes y aptitudes básicas del mismo, para cubrir un puesto en la empresa y así poder cumplir con los requisitos de la vacante a la cual se está postulando.

Rotación de personal: Ocurre cuando el personal contratado no es el idóneo para el puesto asignado. Esto conlleva a pérdidas de tiempo, ya que se debe mover personal antiguo en la empresa, de un puesto de trabajo a otro, lo que causa una disminución productiva, generando así, pérdidas de dinero.

Clima laboral: Al contratar nuevos empleados y que este sea inadecuado, crea un impacto en el personal antiguo. Esto ocurre ya que el nuevo trabajador rompe la cultura organizacional dentro de su departamento, mientras se adapta a su nueva rutina, lo cual creará un clima poco saludable entre sus compañeros de trabajo.

Repetición en el proceso de aprendizaje: Generalmente, el nuevo ingreso aprende sus funciones ya en el campo de trabajo, algo totalmente natural. El problema de este aprendizaje viene cuando el contratado no cumple bien su función y alguien más debe repetir todo este proceso y hacer la corrección. 

Contratar al personal equivocado para su organización puede generar consecuencias negativas, por tanto, debemos tener en cuenta que realizar una selección de talento asertiva es un gran desafío, que puede no resultar como se esperaba, y que podría afectar a su empresa de maneras inimaginables. 

Al contratar nuevos talentos, no solo se está empleando a una persona para que ocupe un puesto de trabajo a cambio de una remuneración, sino también se está contratando a alguien que pueda aportar valor positivo a la organización.